reseña

La historia se navega, sin darnos cuenta, Nadie me verá llorar de Cristina Rivera Garza

La historia de ambos personajes se amarra en el momento mismo del que, aunque no lo recordaran, era su segundo encuentro. Mientras Buitrago, en su papel de fotógrafo, captura la imagen de los internos del hospital de la Castañeda, Matilda le dirige la palabra y pregunta “¿Cómo es que se convierte uno en fotógrafo de locos?”. Esta pregunta dispara para el fotógrafo una duda y un interés profundo por la biografía y personalidad de la interna.